Cuando hablamos de orgasmo en la mayoría de los casos no se imagina algo tan complicado de conseguir, pero en algunas personas puede llegar a suceder; la diferencia radica en el tiempo de excitación y respuesta sexual humana de cada individuo. Por ello, una de las claves para lograrlo es el autoconocimiento y autocuidado, como dicen “el conocimiento es poder” y entender cuáles son necesidades propias es oro, mantener una buena comunicación con la pareja de intimidad (si se tiene) y estar física y mentalmente predispuestos también ayuda mucho.

Como seres humanos, a veces, algunas creencias y prejuicios nos condicionan y nos impiden disfrutar, y siempre aparece el cuestionamiento de ¿qué hay de cierto y de falso en muchos de los mitos y creencias que circulan sobre este tema? Aquí le presentamos algunos más populares:

1. “A las personas con vulva les cuesta llegar al orgasmo”
   En general, el tiempo que tardamos en responder a un estímulo sexual es más largo y el número de personas con vulva que llegan al orgasmo durante el coito es menor que el de las personas con pene. Las razones son, sobre todo, culturales, religiosas y sociales. Pero eso no quiere decir que no se puede alcanzar de forma rápida o antes que ellos. De todos modos, para llegar es necesario entrar previamente en la fase de excitación y los tiempos que cada persona necesita son diferentes.
2. “Hay más de un tipo de orgasmo”
   Hasta hace poco se creía que podíamos alcanzar dos tipos de orgasmo: el producido por la estimulación vaginal y por la del clítoris. Ambas formas de estimulación pueden provocarlo, pero siempre es el mismo debido a la extensión interna que abarca el clítoris.
3. “La persona que no lo alcanza, no disfruta”
   La actividad sexual debe ser siempre satisfactoria. El orgasmo es el clímax y la consecuencia, pero no ha de ser el único objetivo. Además, que le cueste alcanzarlo no significa que se tenga un problema, así que no hay que obsesionarse. Aunque si ese hecho genera frustración o malestar es mejor consultarlo con un especialista. La sexualidad requiere tiempo, dedicación, predisposición, estimulación, atención a las sensaciones, una buena comunicación y dejarse llevar.
4. “El mejor orgasmo se alcanza en pareja”
   No necesariamente. El concepto de “el mejor orgasmo’ es muy personal, y se puede experimentar en solitario o en pareja. Sin embargo, se tiene la idea preconcebida de que llegar en pareja y a la vez es la situación perfecta. Aunque es muy satisfactorio, conseguirlo de forma habitual no es fácil. Si pasa ¡disfrútelo! Pero no lograrlo no debe ser un motivo de estrés ya que no tiene nada que ver con el amor ni con ser un buen amante, sino con los tiempos de excitación y de respuesta sexual, que entre personas son bastantes diferentes.
5. “Las personas con vulva puede tener multiorgasmos”
   La respuesta es sí. Pero no sucede en todos los casos. Se pueden tener orgasmos de poca intensidad, uno único o varios de alta intensidad, depende mucho de la estimulación.
6. “Masturbarse ayuda a mejorarlos”
   Pese al tabú que existe sobre este tema, masturbarse es una actividad bastante común, saludable, que puede ayudar a conocer mejor nuestro cuerpo, definir qué se desea y disponer de recursos para favorecer los orgasmos, o lograr que mejoren. Pero si solo aparecen con la masturbación, es necesario averiguar qué bloquea o impide obtener placer cuando se está en pareja

Cada vez más se van derribando este tipo de casos frente al tabu del sexo como placer, lo más recomendable es sí se tiene alguna duda se consulte con un profesional especializado en sexualidad para un seguimiento personalizado.